Primo de Anónimo

lunes, 27 de junio de 2011

Aburrimiento valenciano

Estimados todas/os/es

El aburrimiento, según nuestra ilustrada RAE, es el cansancio o tedio originado por disgustos o molestias, yo añadiría también por la repetición hasta el infinito de una misma situación.

Hay que reconocer que el único gran premio que ha sido fiel a sí mismo, en lo que llevamos de temporada, ha sido el valenciano. Ni DRS, ni Pirelli, ni Kers, ni gaitas. En la dársena portuaria valenciana es difícil adelantar, si no milagroso, y menos si no hay un pequeño accidente, un safety-car o un abandono. Ayer, ni tan siquiera tuvimos eso. Probablemente sea el circuito en el que se vieron o verán menos adelantamientos y cosas excitantes, quizás solo sea superado negativamente por la otra gran obra al absurdo de los tilkódromos que es Hungria.

Es muy aburrido que el mazó pilón de Vettel lleve a estas alturas siete de ocho poles, si lo prefieren en números, el 88%, se le escapó la del GP de España pero para que su compañero australiano no se cabrease y se fuese corriendo a Toleman. Ha ganado seis de las ocho carreras disputadas (¡El 75%!), pero es que su peor resultado es un segundo puesto, consiguiendo la friolera del 93% de los puntos máximos posibles. Señores de la FIA si quieren alargar la vida de este campeonato les recomiendo que le quiten la superlicencia a Vettel durante los próximos diez grandes premios y regalen a Newey el reto de la construcción del velero que devuelva a su Graciosa Majestad el imperio sobre los mares … de la America´s Cup. Si hay alguien que tenga alguna duda de la ventaja aburrida que tienen los RB, sobretodo el de Vettel, ante el resto de alegres mortales, que lo diga y lo discutimos.

Los Ferrari, aunque crean que no, están mejorando y mucho. Mi estimado amigo José Arce me recriminará no haber escrito la frase en tercera persona del singular ¡Perdóname! Pero es que soy de Ciencias puras. Al principio no aparecían por ningún lado, y ahora Alonso consigue ponerlos en los primeros puestos de alguno de los libres. Cosa que solo sirve para que el forofo calvo intente vendernos que esta vez sí. A esta aburrida llamada de grupo siempre contestan los de CLESA (Central Lechera de Eriodistas Sin Aburrimiento, les falta un algo para llegar a ser periodistas de verdad), que hacen retumbar por toda la blogosfera ... que esta vez sí se ganará, que hay un sentimiento, que las mejoras que traen son inmensas, que la FIA está de su lado, que los arroces en la Comunidad Valenciana son exquisitos, Y lo único verdadero es lo último. Incluso la English paella de San Fulgencio es sublime. Del resto … aburridas chácharas.

Los McLaren están aburridos de su grandeza y belleza, por lo que después de algo ilusionante se duermen, aburriendo incluso al bueno de Hamilton rogándole que vaya más despacio cuando el coche corre o imponiéndole ir más rápido cuando no anda. Un poquito de comprensión para con sus pilotos no estaría mal por parte de la escudería.

Y esto fue todo lo que dio de sí la solana valenciana, o que llamase mi aburrida atención. Bueno reseñar que Massa partió desde la posición número cinco de la parrilla y, cuando estaba haciendo una salida muy bonita, se encontró con el amigo australiano de Alonso. Este le cerró la puerta y le afeo todos los riesgos que había tomado para adelantar a su compañero y a Hamilton. Esto permitió a Alonso adelantar las dos posiciones que había perdido al principio de la partida. Webber si estas aburrido de que te adelanten por todos los lados en las salidas pásate a Hispania ¡Nunca los adelantan! Se nota que Webber y Alonso son más que amigos ¿Alguien vio adelantamientos más limpios?

PD. Alguersuari, aburrido de todas las críticas y de todas sus auto-excusas, hizo una carrera aburrida, consiguiendo otro octavo puesto ¡Sigue aburrido!

lunes, 20 de junio de 2011

Newey ¿La mejor estadística?

Estimados todas/os/es

Una vez que ya he cabreado a mis amigos ferraristas y, también, a mis amigos seguidores de Schumacher, al poner los resultados que obtuvieron referenciándolos a distintos parámetros, como son la longevidad, la suma total de acontecimientos, etc., y por tanto haciéndolos más mortales. Ahora, que ya nadie cree que pueda cabrear a más gente, me pondré a referenciar a los ingenieros, para comprobar si esta lista de posibles agraviados no pude aumentar ad infinitum. Los pobres ingenieros son los responsables en el 80% de los éxitos y fracasos de la escudería y del piloto, y rara vez tenemos algún comentario, positivo o negativo, para los verdaderos héroes de la F1.

Hay que empezar diciendo que cuando se atribuye un éxisto a un ingeniero con nombre, eso es falso, ya que el resultado es el compendio de un montón de ingenieros trabajando en pequeñas parcelas, que van sumando, y acaban siendo el éxito o el fracaso. Luego vaya por delante que cuando decimos Newey, solo quiere decir que en el conjunto él estaba, pero también había (hay) unos centenares más de gentes con mucho ingenio, que son los que van apoyando. Una vez dicho esto hay que decir que a veces la contribución al éxito de la persona que estamos evaluando ha sido pequeña, mientras que otras ha sido muy grande. Pero independientemente de eso, siempre le daré el mismo peso a los resultados. Antes de empezar con los datos, comentar que un mismo éxito pude ser atribuido a dos ingenieros distintos si ambos pertenecían a la misma escudería el mismo año. Y por último, hay que señalar que el peso en los logros de un ingeniero recién contratado puede ser muy bajo, mientras que su impronta en el coche del año siguiente a la cancelación de su contrato puede ser vital. A pesar de esos hechos, y para realizar la tabla inicial he tomado los logros obtenidos por los ingenieros desde la temporada de su fichaje hasta la temporada que terminaron (incluso si lo dejaron a mitad de temporada, no así si fueron fichados). Teniendo en cuenta todas esas salvedades, y los errores a la hora de contar, los datos que se obtienen directamente de las bases de datos, aparecen en la siguiente Tabla. En ella aparecen el número de grandes premios disputados (GP), aquellas carreras que no fueron disputadas (No disp.), las victorias (Vict.), las poles, el número de vueltas rápidas en carrera (Vuel. rap.) el número de campeonatos de pilotos ganados (Pilot.), así como el de constructores (Cons.) y las temporadas que permanecieron en la Formula Uno (Temp.). La Tabla, como no podía ser menos, la he confeccionado con mis nueve héroes, esos que están en la cabecera. Y aparecen según están allí (casi fecha de nacimiento).

Ingeniero
GP
No disp.
Vict.
Poles
Vuel. ráp.
Pilot.
Cons.
Temp.
Chapman, C.
301
136
72
87
63
6
7
25
Gardner, D.
113
10
26
16
23
3
2
9
Forghieri, M.
228
41
45
51
53
5
6
18
Byrne, R.
405
39
110
83
135
7
7
24
Head, P.
433
12
113
124
128
7
9
26
Murray, G.
330
43
66
79
59
6
4
20
Barnard, J.
273
15
55
27
47
4
3
15
Brawn, R.
540
14
131
93
118
10
10
28
Newey, A.
422
15
118
143
134
7
7
22




El primero es el mítico Colin Chapman, que llevó a cabo toda su labor en el legendario y único equipo Team Lotus (los actuales no merecen llevar ese nombre y deberían de prohibírselo), desde sus comienzos en el GP de Mónaco de 1958, hasta la temporada 1982 en la que nos dejó, incluida. Al igual que Byrne y Newey, Chapman fue también piloto. Alcanzó a pilotar un Vanwall en el GP de Francia de 1956, quedando el último, después de un accidente. Y quizás eso le abrió los ojos para ser uno de los más grandes en el muro y aportando ideas frescas ¿Sabe alguien de la FIA actual lo que significa eso?



Mauro Forghieri (1964-81) y Patrick Head (1977-2004) son los otros dos ingenieros que han sido fieles a sus colores, el primero a Ferrari y el segundo a Williams.



Derek Gardner trabajó para tan solo dos equipos, Matra (1969) y Tyrrell (1970-77). Es verdad que su peso en el éxito de Matra no fue máximo, pero en los del equipo Tyrrell fue muy grande, consiguiendo que el primer diseño totalmente suyo, y hecho en el garaje de su propia casa, fuese la pole en su primer GP (Canadá 1970) ¿Quién podría hacer eso hoy día, con la estrechez de miras de los rectores de la F1?



El sudafricano Gordon Murray es otro ingeniero que tan solo estuvo en dos equipos de F1, consiguiendo el récord porcentual de victorias en un campeonato (McLaren-1988). Trabajó para Brabham (1970-86) y McLaren (1987-91). Al igual que su compatriota Rory Byrne que diseño para Toleman (1981-90) y Benetton (1992-96), que son la misma estructura con distintos nombres, y para Ferrari (1997-2007).



John Barnard estuvo enrolado con McLaren (1972-75), Parnelli (1976), McLaren (1980-86) y en Ferrari (1987-90 y 1994-96) y Benetton (1991-92). Todo un apaga fuegos de las grandes marcas.



Ross Brawn es otro trotamundos de la F1, habiendo estado involucrado con las escuderías de Williams (1978-84), Lola (1985-86), Arrows (1987-88), Benetton (1991-96), Ferrari (1997-2006), Honda (2008), Brawn (2009) y Mercedes (2010-actualidad), aunque las tres últimas son la misma estructura, pero con diferentes nombres.



Y el último es el ahora vilipendiado Adrian Newey, que ha diseñado para Lola (1985-86), March (1987-89), Leyton House (1990), Williams (1991-97), McLaren (1998-2005) y Red Bull (2006-actualidad).



Según los números de la tabla, no cabe duda que es Brawn el mejor, ingeniero que no se caracteriza por ser un genio del diseño pero si tiene una visión de conjunto y un liderazgo dentro de los grupos de trabajo que hacen que las creaciones de su grupo sean las mejores claramente. Sobretodo a la hora de ganar campeonatos, veinte en total, ya sea de pilotos como de constructores. Sin embargo, sus coches no suelen ser rápidos. Esa categoría, poles y vueltas rápidas, es patrimonio casi exclusivo de Newey y Head (¡Cuidado que la Williams victoriosa de los años 90 es una hija de estos dos padres!). Otro dato curioso son el número altísimo de no participaciones que tiene Chapman (al igual que otros ingenieros). Pero hay que recordar que durante mucho tiempo la F1 eran carreras de velocidad, no de resistencia como son hoy día. Además, cuando se trabajaba en equipos pequeños la posibilidad de no conseguir la fiabilidad mínima era muy alta, nada que ver con lo de ahora, que incluso ese aspecto está reglamentado y normalizado.

Pero estos números deberíamos de referenciarlos a algo y, siguiendo la filosofía de anteriores entradas, no debería de extrañar que las victorias, poles y vueltas rápidas las dividiésemos por el número de GP disputados, obteniendo el porcentaje de cada uno de estos parámetros. Por otro lado la cadencia de campeonatos, o número de temporadas dividido por el de títulos es otro número muy querido por este escribidor. Haciendo esos simples cálculos tenemos la Tabla segunda.

 


Ingeniero

% Victorias

% Poles

% Vueltas rápidas.
Cadencia campeonato de pilotos
Cadencia campeonato de constructores.
Chapman, C.
24
29
21
4.1
3.6
Gardner, D.
23
14
20
3
4.5
Forghieri, M.
19
22
23
3.6
3
Byrne, R.
27
20
33
3.4
3.4
Head, P.
26
29
30
3.7
2.9
Murray, G.
20
24
18
3.3
5
Barnard, J.
20
10
17
3.8
5
Brawn, R.
24
17
21
2.8
2.8
Newey, A.
28
34
32
3.1
3.1







Si con los números de la Tabla primera la elección del mejor era confusa y difícil, cuando relativizamos los datos, entonces, la cosa es incluso más complicada ¡Qué diferencia con los datos de las escuderías y pilotos! Todo esto nos está mostrando que estamos comparando a nueve grandísimos ingenieros y que cualquiera de ellos es excelente. No obstante podemos ver que sí, a la tercera tanda de estadísticas, acerté, Newey es el que mejor porcentaje de victorias, poles, y vueltas rápidas tiene. Y si la FIA y la maquinaria publicitaria filo McLarenista y Ferrarista, y sus acólitos voluntarios y prestados, no lo impiden con sus insidiosas noticias que lo tildan de tramposo y con los cambios de las reglas a mitad de partido para impedir su triunfo, este año logrará tener una cadencia de campeonatos imbatible.




A pesar de todos los números, permítanme que mi corazoncito sea para Gardner.

lunes, 13 de junio de 2011

Joseph G. Henri, el eterno luchador canadiense

Estimados todas/os/es

El conjunto de cabañas en lengua iroquesa, nombrado por nosotros como Canadá, es una monarquía parlamentaria donde reina su Graciosa Majestad Isabel II, donde dos lenguas son co-oficiales. A parte de eso, y de que es (o mejor dicho fue) el país ONU, ya que siempre estaba involucrado en todos los fregados donde aparecía este organismo, que posee una de las rentas per cápita más elevadas y de que los ciudadanos de la república del sur hacer escarnio contantemente de ellos, poco más sabemos de este inmenso país.

Los aficionados a la F1 sabemos algo más, pero tampoco grandes cosas. Lo que sabemos es que su circuito en Montreal es uno de los clásicos que nadie quiere que desaparezca. Salvo Sir Dinero Ecclestone, que siempre intentará cambiárnoslo por un tilkódromo insulso y similar a todos los anteriores en cualquier parte desconocida de este planeta (¡No os preocupéis que cuando se pueda retransmitir desde Marte ya nos aburrirán con una carrerita desde allí!). El GP de Canadá se ha disputado allí desde 1978 (en 1987 y en 2009 no se corrió este GP) y siempre se cierne sobre él una incertidumbre. Los muros, la lluvia y los safety-cars.

Los aficionados a la F1, sobre todo los ferraristas, conocen además a un señor de nombre Joseph G. Henri. Un piloto con tan solo 6 victorias (por cierto, ganó la carrera inaugural de este circuito), 2 poles, 8 vueltas rápidas, y 13 pódiums en sus seis temporadas en este circo. Hizo llorar de alegría al viejo y duro de Don Mauro Forghieri en Mónaco-81. Su mejor clasificación en un campeonato fue segundo en 1979, campeonato que ganó su compañero de equipo. Tan solo corrió para una escuadra ¡Falso! También lo hizo para McLaren, pero fue media temporada y al principio de su carrera. Pero con esos pésimos números, sus carreras de 1980 lo consagraron como el piloto ideal de Ferrari. Da igual que no ganase campeonatos, da igual que no ganase carreras, pero luchaba, y ofrecía pundonor y adelantamientos hasta el final. Sí, estoy hablando de J. Gilles H. Villenueve. Piloto que sigue en el corazón de todos los ferarristas europeos, incluso por encima del laureado Schumacher, siendo la vara de medir de todos los pilotos rojos.


Pues bien, después de ver el interminable GP de Canadá tengo que decir que a veces veo voces y oigo visiones. Lo siento, es que como soy de Ciencias confundo todas estas cosas del más para acá. No fue sangredehorchata Button quien iba en el McLaren número 4, sino el espíritu del gran Villenueve, que se aburría y lo poseyó. Después de seis pasos por el paddock, sanciones, choques, adelantamientos imposibles, y guerras psicológicas ganó a lo gran campeón ¿Y a este señor lo llamó paquete, segundón y persona sin carisma, ni sangre de campeón? ¡Cuán equivocado que estoy siempre! Después de la última parada llamó a su equipo preguntando cuales eran las gomas de los 4 o 5 que estaban por delante de él y cuantas vueltas las llevaban. Ante esta conversación, el comentarista televisivo nos advirtió que eso significaba que Villenueve (¡Perdon! Button) estaba pensando adelantarlos a todos. Yo, incrédulo, pensé que era culpa del nacionalismo de piloto y locutor.

El piloto ideal para ser poseído por la locura de Villenueve era Hamilton, pero este lleva unos GP’s en los que quiere sacar dos ruedas de ventaja a su propio coche, y eso suele ser algo difícil, incluso hasta imposible. Como consecuencia, la lió parda con Webber y con su propio compañero ¡Menos mal que los hados le rompieron la suspensión trasera! Sino aun estaríamos viendo el GP de Canadá debido a todos los safety-cars que quería provocar.

Los herederos rojos de Villenueve empezaron razonablemente bien la carrera, incluso pensé que el segundo estaba siendo más rápido que el primero y que pronto oiríamos eso de Alonso, Massa is faster than you ¿Me’ntiendes? Pero antes de que el ingeniero de turno lo dijese, el departamento de copy&paste, en un alarde mas, se dio cuenta que Villenueve-Button había puesto gomas de casi mojado y venia quitando pegatinas a diestro y siniestro. Y aunque el departamento de rainingagain le acababa de decir a Massa que en unos minutos tenía que sacar el kayak, al menos eso oímos en la pérfida Albión. Metieron al pobre Alonso, a ponerle unas ruedas para el desierto. En tan solo unas pocas vueltas Alonso estaba en medio de todo el jaleo y muy lejos del Caballero Vettel. Para colmo de desgracias intentó ponerse a la altura de Villenueve y acabó jugando en los pianos.

Massa no fue poseído por nada ni nadie, siguió siendo Mr. Tercio, pero quizás algo peor. No consiguió adelantar a mi kamikaze favorito, cuando estaba tercero, pero es que Schumacher le enseñó cómo se adelanta de dos en dos sin despeinarse. Eso sí, ahora achaca al pobre de Karthikeyan su no saber adelantar, y el puesto logrado.

Después de esta carrera ya se pueden poner los de Ferrari a pensar en 2014, porque antes veo difícil que consigan algo. Incluso Domenicali es de mi opinión, y va a hacer una peregrinación a Lourdes o Fátima, para que se les aparezca Villenueve. Porque ni el Vaticano tiene poder para mejorar los diseños rojos.

Del resto de pilotos, destacar el carrerón de Webber, pero que ante la dificultad de adelantar a Schumacher se le vio miedoso. El adelantamiento doble de Schumacher, mostrando que donde los miedosos ven un posible roce, él sigue viendo una posibilidad de goce, aunque al final el paso del tiempo nos pone donde solemos estar. Y por último, Vettel que demostró que cualquier piloto pasado fue mejor, y se asustó al ver a Villenueve.

En la clasificación de Zolder (Bélgica-82) nos dejó la persona de Joseph G. Henri y al día siguiente se corrió el gran premio sin ningún tipo de pudor por parte de la FIA. Y ahora nos arrebatan las salidas, nos suspenden las carreras cuando llueve y damos vueltas con el safety-car hasta que está seca la pista ¡Que blanditos nos hemos vuelto!